Mucho más que recordar, mucho más que no olvidar - Nota de Prensa

 El Concejo Municipal de Chacao realizó una sesión especial con motivo del Día Internacional de Conmemoración en memoria del Holocausto

"Decía Elie Wiesen que en Auschwitz no sólo murió el judío, sino también el hombre. Cuando hablamos de "crimen contra la humanidad" no solo hablamos de genocidio, es decir, atentado contra la integridad biológica de la especie, sino también de crimen contra lo humano del hombre, contra sus conquistas civilizatorias frente a la barbarie. Hacer política con memoria es hacer presente en ella el duelo y la deuda. Estamos en duelo porque nos han privado, han destruido un momento de humanidad que nos pertenecía y que de haberla tenido hubiéramos hecho un mundo mejor" 

Manuel Reyes Mate



En estos días el mundo conmemoró los 75 años de la liberación del campo de concentración y exterminio Auschwitz-Birkenau. Las puertas del infierno se abrieron y los sobrevivientes volvieron a respirar en libertad, pero su integridad como seres humanos fue mancillada y dejó una cicatriz para siempre, tanto en ellos como en la humanidad. La ONU declaró el 27 de enero como el Día Internacional de Conmemoración en memoria del Holocausto, una fecha que este año tuvo una significación especial. Nuevamente se subrayó el compromiso de luchar contra el antisemitismo, el racismo y toda otra forma de intolerancia que pueda conducir a actos violentos contra determinados grupos humanos.




El Concejo Municipal de Chacao se unió a estos actos y como lo ha hecho anteriormente, invitó a una sesión solemne que tuvo lugar en el Teatro del Centro Cultural Chacao, dando así continuidad a una idea materializada hace unos años por el entonces concejal Shully Rosenthal. En esta oportunidad, presidió la sesión el alcalde Gustavo Duque y abrió el acto, Máximo Sánchez. Luego intervino Gonzalo Ciffone, presidente de la comisión de Gestión y Turismo, quien recordó a muchos judíos que encontraron en Venezuela un lugar para rehacer sus vidas y que con su trabajo contribuyeron a enriquecer la cultura, las ciencias y la economía nacional. Trajo a la memoria las palabras de Hillo Ostfeld (sobreviviente de la Shoá y quien al morir no sólo dejó un vacío en la comunidad judía venezolana, sino en el ámbito industrial del país) "Rusia me dio la libertad, Israel me dio la dignidad y Venezuela me permitió seguir creyendo en la vida".

De inmediato se entregó una copia del acuerdo al embajador de Francia, Romain Nadal, quien fue el orador de orden del acto. Su palabra alertaron sobre las nuevas maneras que el antisemitismo y el fanatismo tienen para expresarse.  Ratificó el compromiso de Francia en luchar contra cualquier forma de racismo y antesemitismo, pues ambos representan el odio hacia la humanidad.



Para cerrar el acto se seleccionó al Grupo de Teatro Musical Comunitario Tiempos de Broadway que presentó la historia de dos hermanos que son separados durante el mandato de Hitler. Cuando se preparaban a emigrar, después del asesinato del padre, llegó la noche de los cristales rotos, la madre esconde a sus hijos en un anexo secreto, donde el hermano es descubierto por un militar nazi y lo lleva a Auswichtz-Birkenau, mientras que la hermana se salva de ese destino pero se separan para encontrarse cuando son adultos. Las canciones y la danza expresan la tragedia.

Para cerrar,  la música dejó su mensaje de esperanza en una composición que logró unir los acordes de un pajarillo con su ritmo frenético con otros melancólicos que recordaban la banda sonora  de la Lista de  Schindler, que llevó al auditorio a rememorar ese bosque o a esa ciudad europeos, que detrás de su belleza de hoy esconde el terror y el sufrimiento de aquellos que murieron bajo sus árboles o en las puertas de sus casas y a que no se pueden olvidar aunque no se conozcan sus nombres.